Tengo la esperanza de ser feliz con mi nieto

Publicada en la Gaceta oficial de Cuba versión final del Código de las Familias

El día en que Idalmis María Brizuela González sufrió la pérdida de su única hija, quien falleció víctima de una enfermedad, ella también quiso retirarse de la vida, pero tenía una razón muy fuerte para seguir adelante: su nieto de 5 años.

Cuidar su inocencia, ayudarle a crecer sin su mamá, acompañarlo a la escuela en su primer día de clases, cuidar por su salud en presencia de reiterados cuadros respiratorios, fueron algunos de los propósitos de esta abuela.

Sin embargo, sus anhelos pronto encontraron barreras legales, pues al quedar huérfano el niño, el padre reclama la guarda y cuidado del menor, dejando a la abuela materna sin oportunidadades de formar parte activa de la vida del pequeño.

Refiere Idalmis María que para la familia esa separación fue un proceso difícil, pero más triste fue ver cómo se minimizó la posibilidad de formar parte de la vida de su nieto, al no poder visitarlo con sistematicidad ni compartir con él fuera de la casa de su familia paterna.

Cuidaré de mi nieto

“Mi nieto es mi vida”, señala la abuela, lo único que quiero es su bienestar y su buen desarrollo físico y sicológico para que pueda crecer y disfrutar por igual del cariño, tanto de su familia paterna como materna.

De ahí que tenga absoluta confianza en el nuevo Código de las familias, que será sometido a a votación el próximo 25 de septiembre a través de Referendo popular.

Dicho Código abre puertas e incluye aspectos valiosos como el de tener en cuenta la opinión de los niños y adolescentes en correspondencia con su autonomía progresiva, además que facilita la comunicación familiar y reconoce la importancia de la participación de los abuelos en la vida de los nietos.

Indiscutiblemente, el nuevo Código de las familias salda una deuda histórica con abuelas y abuelos, pues profundiza en el apoyo fisico o afectivo de éstos para con los nietos, al tiempo que gozan de alguna preferencia para la delegación del ejercicio de la responsabilidad parental o para que le sea atribuida temporalmente, siempre por razones justificadas.

Por tanto por ese Código inclusivo, de amor, lleno de afectos y emociones, de esperanza, votemos Sí para defender nuestros derechos de familias.


Moraima Zulueta Gómez

Acerca de Moraima Zulueta Gómez

Periodista de Radio Grito de Baire

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