El uso, protección y conservación de los suelos es un aspecto que los agricultores tienen en cuenta con el objetivo de obtener cosechas con calidad y elevados rendimientos productivos.
En tal sentido diversas investigaciones y la aplicación d ela agroecología son implementadas por los hombres y mujeres que trabajan la tierra en el municipio de Contramaestre.
La importancia del cultivo del maní asociado a las labores culturales y conservación de los suelos es una muestra de la relación que existe hoy de la ciencia e innovación en función de la producción de alimentos en el santiaguero territorio.
Plantación que según estudios se obtienen un rendimiento en esta parte del oriente de Cuba entre 3.0 y 3.5 toneladas en vaina por hectáreas. Según datos ofrecidos por investigadores del ramo se han alcanzado como promedio en esta jurisdicción contramaestrense aproximadamente 66 toneladas por año.
Segúnargumentó Melisa Salina Rodríguez, joven productora del territorio, esta producción es valorada fundamentalmente en nuestro municipio por la calidad de los suelos y las texturas que poseen. En la mayoría de los casos donde son cultivadas estas plantaciones, los suelos carecen de fosfatos, aspecto que en los países de primeras tecnologías se le aplican técnicas en favorezcan su desarrollo y rendimiento. En la localidad de Contramaestre- dijo la agricultora- el tipo de suelo que predomina es de tipo 3 excepto en la localidad de Laguna Blanca que tienen calidad tipo 1, entonces al carecer de fosfatos debemos incorporar este elementos a través de los abonos orgánicos y todas las labores culturales que se le pueden realizar por medio de la agroecología a los suelos deteriorado que tenemos,
Cultivo que para su desarrollo y conservación del suelo también se implementa prácticas agroecológicas. Al respecto Salina Rodríguez dijo, los abonos caseros que se realizan principalmente cáscaras de plátanos en agua. Solución que ayuda a las plantaciones de maní. También los abonos sobre la base del humo de lombriz incorporado directamente a las plantaciones cuando pasa a la fase vegetativa para la producción de las vainas que contienen los granos. También se puede aplicar los propios desechos de cosecha, el compost y se ve el aumento en la producción considerablemente de un cinco por ciento.
Alternativa que en el contexto económico actual contribuye a mantener la protección de los suelos así como responder a lo estipulado en la ley de soberanía y seguridad alimentaria.
Aunque tengamos la posibilidad de aplicar algún fertilizante siempre recurramos a lo que sea más benevolente con nuestro medio ambiente. Que se extienda el uso de todos estos fertilizantes y abonos orgánicos que favorecen la formación y regeneración natural de los suelos. Práctica que todos los productores de maní deberían implementar debido a que como propone la Ley de Soberanía Alimentaria y Seguridad Alimentaria, y Nutricional la utilización de las costumbres locales y prácticas alimentarias de todos los granos y frutos secos que se puedan ingerir en la dieta del ser humano.
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