Se despide abril para dar la bienvenida al mes de fiesta y alegría proletaria porque este Primero de mayo, Cuba se vestirá nuevamente de colores, unidad y patriotismo, para reafirmar en el tradicional desfile que el socialismo en la nación es invencible.
En compacta presencia, un mar de pueblo abrazará al amanecer del primer día de mayo primaveral, para agradecer por siempre y ver crecer la luz del sol que iluminará a los hijos de la Patria en medio de circunstancias bien difíciles pero posibles de superarlas.
Pese a las restricciones existentes agravadas por el injusto y criminal bloqueo, la clase obrera de Contramaestre junto con su familia, expresará su amor por la Isla, por lo que se es, y se siente con sano orgullo: la condición de cubanos dignos, libres y soberanos.
Por Cuba juntos creamos, será la consigna que retumbará en la céntrica Carretera central del municipio para demostrar el respaldo a la obra revolucionaria y sus conquistas, para defender el movimiento obrero sindical en el poder y hacer realidad una hermosa expresión de solidaridad y hermandad entre los retoños de la nación.
En estrecha alianza con intelectuales, campesinos, hombres y mujeres creadores todos de riqueza, se demandará el fin de la agresión sionista contra la población Palestina. Se protagonizará este Primero de mayo otra jornada de unidad y victorias con múltiples iniciativas y una asistencia multicolor.
Los jóvenes como baluartes de la unidad y símbolo de continuidad, ratificarán sus compromisos de trabajo en aras de una mejor sociedad, y con la firme convicción de transitar por los senderos de equidad y justicia social.
Otra vez piernas y gargantas visibles, reeditarán otro Primero de mayo, con las banderas desplegadas al viento para levantar los puños y los latidos victoriosos, con pasos fuertes, seguros en homenaje eterno a una fecha identitaria, que gracias a Fidel devino en una gran fiesta de unidad proletaria.
