La participación de la mujer es esencial en todas las actividades de la sociedad cubana. En el sector empresarial e industrial su protagonismo es elocuente y un ejemplo se localiza en la Procesadora de Café del municipio santiaguero de Contramaestre. Allí Idaelia Vega Peña se desempeña como jefa de brigada y ha desplegado toda su creatividad e iniciativas, para contribuir con el funcionamiento de la industria.
Hace un par de semanas regresó del VI Encuentro Nacional de Mujeres Creadoras. Allí compartió su experiencia en la recuperación, junto a tres de sus compañeros, de una batería de bastidores esenciales en el proceso de selección del café.
Esta innivadora y sus colegas repararon diez elementos de este tipo. Para ello usaron materiales reciclados con los cuales confeccionaron grampas y pelotas, devolviéndole su vitalidad y eficiencia.
La capacidad de resiliencia de los cubanos se demuestra todos los días con ejemplos como el de Idaelia y sus compañeros. Ella habla con orgullo de su participación en el VI Encuentro Nacional de Mujeres Creadoras.
Idaelia regresa a su faena en ese papel insustituible de la mujer cubana como inspiración desde la creatividad, el ingenio y laboriosidad.
