“Por Cuba juntos creamos”es la consigna que convoca a este Primero de mayo a la clase proletaria, a cubanas y cubanos que aman y fundan, que ríen y sueñan, que trabajan y construyen, que crecen y deciden.
Nuevamente la gran multitud de hombres y mujeres protagonizarán una gran marcha de sudor obrero, con amor en el corazón, con deseos de avanzar, de crear, de buscar soluciones para responder a retos y desafíos en presencia de tiempos difíciles.
Conscientes de promover la creatividad en cada sector y puesto de trabajo, el compromiso de los contramaestrenses de aportar al desarrollo del país para seguir avanzando, será expresado en el multitudinario desfile con la compañía también de pioneros, jóvenes, campesinos, amas de casa, combatientes, jubilados, cuentapropistas, y trabajadores estatalizados.
José Martí resurgirá en esa avalancha patriótica que recordará el natalicio 171 del Apóstol, cuyo pueblo inspirado en su legado denunciará las patrañas de la potencia imperialista que pretende doblegar una Isla que nunca será esclava del “gigante de las siete leguas”
Fidel desfilará con sus obreros de las fábricas, de las escuelas, del hospital, con los agropecuarios, con los intelectuales, artistas, deportistas, comerciantes, gastronómicos, y alimentarios, todos llamados a corregir distorsiones y reimpulsar la economía del país.
Fidel será la luz que iluminará la multitud de rostros, banderas, pancartas, y consignas, multitud que dignificará la Patria con trabajo, con el amor que sale de sus manos y sentimientos que afloran en el corazón.
La marcha distintiva, guiada por las más grandes conquistas revolucionarias, exaltará además los 65 años del enero victorioso para reafirmar la ideología del cubano,de seguir siendo una nación socialista, que defiende y pelea por su independencia, su paz, su soberanía.
La condena enérgica contra el genocidio del pueblo de Palestina por parte del gobierno sionista de Israel con la complicidad de Estados Unidos, será voz unánime y pública en la gran marcha obrera por el Día internacional de los trabajadores en Contramaestre.
Otra vez piernas y gargantas visibles, volverán a ratificar su lealtad al modelo social cubano, pese a las adversidades bien complejas, con la invariable determinación de continuar por los senderos de equidad y justicia social.
Con puños cerrados y levantados, como expresión de firmeza y continuidad, Contramaestre reeditará otro Primero de mayo con amor infinito a la Patria, para salvar la obra revolucionaria con solidez patriótica.
