“La más noble de las ocupaciones y quién sabe si la más grata es la de enfermero” así expresaba nuestro Héroe Nacional José Julián Martí Pérez y no se equivocaba, hoy a pesar de las carencias a las que se enfrentan, ellos, enfermeros y enfermeras son imprescindibles en la atención al paciente.
Este ejército de batas blancas que en Contramaestre, municipio del oriente cubano, suma más de 600, celebra el 12 de mayo Día Internacional de la Enfermería que este año está presidido por el lema “Nuestras enfermeras. Nuestro futuro. El poder económico de los cuidados”.
Con una jornada cargada de iniciativas la Filial de Enfermería del Hospital General Docente Orlando Pantoja Tamayo de Contramaestre, integrada por más de 300 profesionales desarrolla por estos días múltiples iniciativas encaminadas a enaltecer su obra y a la realización de actividades de investigación para elevar su nivel científico técnico como expresa la Licenciada Dania Cardoso Ayala, vicepresidenta de la Filial en la institución insigne de la Salud pública del territorio.
“Dentro de las actividades tenemos la actualización de los murales, la visita a los centros de enseñanza Secundaria Básica “José Tey Saint_ Blancard y el Preuniversitario Antonio Santiago García para realizar conversatorio con los alumnos acerca del embarazo en la adolescencia, así como asalto a la guardia general de la institución médica para dar a conocer las actividades por la jornada. Matutinos especiales sobre la fecha, las donaciones de sangre y encuentro con enfermeros y enfermeras jubilados para conocer de su experiencia se suman a las iniciativas por el 12 de mayo”.
La Filial de Enfermería en el “Orlando Pantoja Tamayo” de Contramaestre sobresale por el alto nivel científico de sus integrantes de los cuales 222 son licenciados, especialistas 7 y máster 4, mientras que 25 de ellos son enfermeros básicos emergentes.
El máster Santiago Ramos Rojas distingue entre ellos. Ejemplo de profesional, con entrega a su trabajo, dedicación, compromiso y entereza son algunas de las cualidades que sobresalen en él.
Periodista: ¿ Valoras de imprescindible la labor del enfermero?
Santiago Ramos Rojas : Es imprescindible en la atención al paciente tanto grave como menos grave, así como en los distintos niveles de atención médica, de ahí la importancia de la superación científico técnica.
En el hospital la labor es fundamental en el Programa de Atención Materno Infantil, en la atención al paciente geriátrico, así como en el salón de partos y un sinnúmero de tareas que sin el concurso del enfermero serían imposibles.
P: ¿ Qué siente Santiago cuando salva vidas fuera de nuestras fronteras?
S.R.R: Es muy estimulante brindar atención a los más pobres en situaciones a veces muy adversas y es muy estimulante que uno sea capaz con su entereza y conocimientos salvar vidas humanas que es la esencia de nuestra profesión. Siento gran orgullo y doy gracias a la Revolución que nos formó, a nuestro sistema de salud. Todas esas enseñanzas las ponemos en práctica cuando marchamos a enfrentar epidemias como el ébola, el covid, el dengue, así como a colaborar en países donde han ocurrido desastres naturales. Todo eso nos regocija y nos sirve de motor impulsor para seguir trabajando y defender la salud pública en todo el mundo.

Como profesión de servicio y también de muchos retos entrega y altruismo, el trabajo de los enfermeros y enfermeras resulta fundamental para promover salud, prevenir enfermedades y sostener el cuidado a los pacientes.
Así sucede en el “Orlando Pantoja Tamayo” institución de la salud que cuenta en cada uno de sus servicios con el quehacer de la enfermería. Un colectivo que día a día refleja sus conocimientos, juicios y habilidades técnicas y una serie de atributos y actitudes en cada tratamiento, en cada paciente. Así lo ratifica la Licenciada Yanelis Cruzata Leiva, Jefa de Enfermería del Hospital Orlando Pantoja Tamayo de Contramaestre.
“Este es un colectivo que a pesar de las limitaciones económicas que enfrenta el país producto al bloqueo estadounidense trabajamos con el corazón abierto, con una carga de sentimientos en la atención al paciente como si fuera un familiar, para que todos salgan recuperados y tengan un mejor nivel de vida”
Hoy los enfermeros cubanos son un ejército de vanguardia, símbolo de amor, esperanza y consagración plena, así como de alta profesionalidad y ética que todos reconocen y admiran.