El 14 de junio de cada año, personas de todo el mundo se reúnen para celebrar el Día Mundial del Donante de Sangre. Este día es una oportunidad para agradecer a los donantes voluntarios y no remunerados su contribución a salvar vidas, y para concienciar sobre la necesidad constante de donar sangre con regularidad para garantizar la calidad, seguridad y disponibilidad de sangre y hemoderivados para quienes los necesitan.
El lema de la campaña de este año es «Dona sangre, da esperanza: juntos, salvamos vidas». Este mensaje destaca la capacidad de los donantes de sangre para salvar vidas. La campaña pretende concienciar sobre el hecho de que se pueden salvar vidas con el simple acto de donar sangre.
Las transfusiones de sangre salvan la vida de mujeres que sufren hemorragias relacionadas con el embarazo y el parto, niños con anemia grave por malaria o desnutrición, intervenciones médicas y quirúrgicas complejas, mejorando tanto la tasa de supervivencia como la calidad de vida de innumerables pacientes, pacientes con anemia falciforme, talasemia, hemofilia o trastornos por inmunodeficiencia, y respuesta a emergencias, ayudando a tratar a heridos en catástrofes naturales, accidentes y conflictos armados.
La campaña dará a conocer las experiencias de personas que han sobrevivido gracias a las donaciones, publicará testimonios de donantes y animará a los donantes habituales a mantener su compromiso. También motivará a personas sanas, especialmente adultos jóvenes, a donar sangre por primera vez.