Cabalgaba Fidel al frente camino a la libertad. La victoria estaba cada vez más cerca. La Batalla de Maffo era el golpe decisivo. El Movimiento de Liberación Nacional marcaba el itinerario rumbo a Santiago de Cuba.
El destino estaba fijado con ideas bien preclaras. Aniquilar las tropas enemigas acantonadas en el BANFAIC de Maffo, era el plan estratégico para marchar tras los pasos victoriosos de una Operación rebelde.
El Gigante de talla universal y sus guerrilleros persistían en el triunfo, abrazando los preceptos del Moncada para regalarle a su Cuba la libertad soñada, las escuelas para la instrucción, la salud para salvar vidas, la Reforma agraria para las cosechas campesinas y el pan para asegurar el alimento.
Batalla de Maffo, clave para la victoria
Ardía en cada pecho barbudo las ansias de justicia. El verde olivo relucía en un poblado donde estremeció el heroísmo luego de 20 días de combate en un Diciembre singular, para doblegar la fortaleza de Maffo y afianzar la gran victoria del pueblo, gracias a las fuerzas rebeldes.
El otrora Banco de Fomento Agrícola e Industrial de Cuba, BANFAIC, pasó a buenas manos aquel 30 de Diciembre para ser hoy una industria necesaria en el desarrollo económico de la nación, para exhibir un arcoiris de colores en Maffo, una demarcación que revive su historia.
A 64 años de la gran Batalla de Maffo, la pulcritud de sus calles y caminos y el trabajo creador invitan a la continuidad, con la evocación del pasado de luchas y la certeza de que aquellos días de gloria merecen ser honrados en la cotidianeidad.
Pese a la dureza de los tiempos actuales, Maffo recuerda el heroísmo de los barbudos del Ejército Rebelde, quien repartió luces y esperanzas en un enero victorioso, gracias a la gesta libertaria del 30 de Diciembre.
