Productores del polo productivo de Laguna Blanca muestran avances en la obtención de alimentos. El uso de la tracción animal, el sellado de las áreas y el intercalamiento, forman parte de la estrategia que asegura buenos dividendos y mayores producciones. 2022 ha sido un buen año para quienes en la Unidad de Base El Ruiseñor siguen la fórmula del usufructuario Raúl Martínez Osorio.
Contramaestre es un municipio pródigo en hombres y mujeres, que día a día trabajan la tierra.
Este es un ejemplo de esos que se levantan con los primeros rayos del amanecer para garantizar el alimento al pueblo, una actividad a la que siempre le ha puesto el corazón.
Productores con intercalamiento
En casi seis hectáreas de la Unidad de Base El Ruiseñor de Laguna Blanca Raúl Martínez Osorio potencia los cultivos varios en el intercalamiento, una fórmula que a los productores de la zona les ha dado buenos dividendos.
Vinculados al área de forma permanente estos productores prefieren el laboreo familiar y han establecido un sistema de entrega de sus producciones a la comercialización en mercados y ferias de la ciudad de Santiago de Cuaba.
Mientras se alista para la próxima entrega insiste en la única fórmula que conoce para hacer producir la tierra de Laguna Blanca.
